6 de Noviembre de 2.009.
Ruta que no por ser muy conocida deja de sorprender vayas en la época del año que vayas, en esta ocasión el otoño ya estaba algo pasado pero caminar entre los hayedos y poder contemplar los marrones y ocres no tiene desperdicio, además según fuimos ganando altura pudimos ver los pinos con esa nieve “azúcar glass” y las fajas con sus primeras nieves.
La ruta comienza en el aparcamiento de la pradera de Ordesa, el día según las previsiones se levanta con nubes altas y apenas nos deja ver el Tozal de Mallo, pero parece que quiere, vengaaaaa. La idea inicial era haber subido por la Senda de los Cazadores pero al ver nieve en la Faja Pelay nos decidimos por hacer la ruta normal.
La ruta comienza en el aparcamiento de la pradera de Ordesa, el día según las previsiones se levanta con nubes altas y apenas nos deja ver el Tozal de Mallo, pero parece que quiere, vengaaaaa. La idea inicial era haber subido por la Senda de los Cazadores pero al ver nieve en la Faja Pelay nos decidimos por hacer la ruta normal.
Seguimos el cartel indicativo hacía la Cola de Caballo y nos adentramos en un frondoso bosque, la cámara hecha fuego, no sé ni a dónde mirar. Las imágenes otoñales se repiten.
Al ir por el margen izquierdo del rio Arazas nos encontramos con el Mirador del Bucardo donde podemos ver pozas azul esmeralda y el ocre de los arboles resistente a irse.
En pocos minutos llegamos al puente de Arripas y su cascada, magnifica. En este puente cambiamos de margen y subimos por la senda que nos llevará a una consecución de cascadas.
Cascada de Arripas.
Cascada de Arripas.
Como digo siguiendo el sendero rápidamente nos encontramos con otro salto de agua, en este caso la Cascada de la Cueva.
Y poco más adelante la Cascada del Estrecho, espectacular.
A nuestra izquierda según subimos se nos abre un paraje conocido como “El bosque de hayas”, ¿por qué será?, uno de mis rincones preferidos y además un viernes por la mañana los dos solitos, ¿qué mas podíamos pedir?, hombre por pedir que dejará de nevar y saliera un poco el sol, ¿serían escuchadas nuestras plegarias?.
Bosque de las Hayas.
Bosque de las Hayas.
Saliendo del “Bosque de las hayas” y tras haber ganado algo de altura de forma cómoda, ya podemos ver los paredones finales, los pinos y abetos por encima del hombro, que bonitos con esa capita de nieve.
Parece que nuestras plegarias han sido escuchadas, de momento para de nevar y estruendo de las gradas de Soaso se empieza a escuchar.
Gradas de Soaso.
Gradas de Soaso.
Una vez salimos del bonito paraje que forman las gradas de Soaso, en apenas 15 minutos estaremos en la Cola de Caballo, antes tendremos que atravesar la extensa pradera con un par de chozos que nos pueden servir de refugio en caso de tormenta. Llegamos a la Cola de Caballo y poder disfrutar de esa caída de agua solos, el sol que estaba ganando terreno a las nubes y el bocata de tortilla invitaban a una distendida mesa y sobremesa, jajaja.
Paula parece hipnotizada.
Paula parece hipnotizada.
Damos buena cuenta de las viandas, y mi cámara dispara a ambos paredones, el cielo se ha abierto sorprendentemente y hasta la brisa de aire ha desaparecido, se está genial.
Toca bajar y una de las imágenes que no quería perderme, Monte Perdido y el Pico de Añisclo por encima del circo de Soaso, parecía que estuvieran quemando la cima pero es que allí arriba tenía que soplar un aire descomunal.
En la bajada me centre mas en las imágenes otoñales que el bosque nos iba dejando además bajamos por la senda que evita volver a pasar por las cascadas de la Cueva y del Estrecho. Entre paredones nevados, pinos y abetos verdes y hayas peladas pero con tonos morados no paraba de darle al botón, flash, flash.
Ya llegando al parking el tiempo parece que nos va a permitir ver a nuestro amigo el Tozal de Mallo y…, ¿qué hay allí al fondo tan nevadito?, ohhh, es el Pico de Otal, bonito, bonito.
El Pico de Otal que tirando de zoom le pillo más cerca, el Tendeñera se ve tapado por su cresta afilada.
Y con esto y un bizcocho llegamos al coche, vamos a Torla a por una cervecita que hay que celebrar que el tiempo nos ha permitido salir, y eso es lo que hicimos aunque entre tanta soledad casi todos los locales de Torla estaban cerrados. Para nosotros fue un gustazo disfrutar un día laboral de este entorno que en otra ocasión había visto cargado de gente.
4 comentarios:
uuuaaaauuuu!!!!
Que bonito es Ordesa!
Que ganas de volver por allí. Enhorabuena por esa bonita ruta que os marcásteis.
Precioso Javi!!! Ainssss como me gusta Ordesa!! Tus fotos son una maravilla!!
Un besote!!
Lau
Gracias chicos, tenemos que ir juntos alguna vez, además con Laura tenemos guia de categoria.
Besotessss ;-D
Preciosas fotos, sí señor. Me ha recordado a este verano, cuando Laura y yo realizamos esta ruta. Eso sí, había muchísima más gente.
Enhorabuena y a seguir sacando foticos ;-)
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